40 graduandos de Peñuelas y Guayanilla reciben becas de EcoEléctrica
19 agosto, 2020Soy Becado de EcoEléctrica
19 agosto, 2021Por: Dr. Héctor J. Ruiz
Biólogo
HRJ Reefscaping
Los corales son seres vivientes que proporcionan la arquitectura fundamental en los arrecifes. Estos coloridos arrecifes proporcionan hábitat, alimentos y refugio para una gran variedad de especies de peces e invertebrados marinos. Algunas de estas, como la langosta, el chapín o el mero son reconocidos por su sabor y valor comercial. La abundante biodiversidad marina aporta a la economía local y atrae al turismo que visita para admirar su belleza mientras bucea.
Los arrecifes de coral son una parte esencial del ecosistema marino de Puerto Rico ya que conecta y sirve de barrera para defensa de los demás hábitats costeros. Los arrecifes reducen la fuerza de las olas que se acercan a la isla y protegen las costas del impacto directo de las marejadas. También los manglares y las praderas de yerbas marinas son hábitats que ayudan en la protección de la costa, además de servir como el hogar de tortugas marinas, tiburones y manatíes. Otras criaturas que crecen encima de los arrecifes, como las esponjas y los tunicados pueden filtrar el agua de mar, reduciendo la cantidad de bacterias lo que ayuda a mantener las aguas costeras limpias y claras.
Bajo el muelle de EcoEléctrica hay arrecifes de coral y praderas de yerbas marinas, mientras que los manglares están en los cayos un poco más afuera. La condición de estos ecosistemas ha sido constante durante 20 años, monitoreados consistentemente a través del tiempo.
Desde antes de la operación de la planta, estos ecosistemas han resistido a cambios ambientales asociados al calentamiento global, y hasta ahora llevan a cabo su función ecológica, evidenciado por la cantidad y la diversidad de la fauna marina que se observa en la zona.
Aun así, en colaboración con las agencias estatales (DRNA) y federales (NOAA) EcoEléctrica ha apoyado una iniciativa de establecer viveros de corales conocidos como la especie Cuerno de Alce, para que puedan ser utilizados en esfuerzos de restauración de los arrecifes cercanos. Este vivero proveerá corales adicionales para reemplazar los que se han enfermado o aquellos destruídos por los huracanes y acelerar el proceso de recuperación de estos arrecifes. Mientras más corales sanos estén creciendo en el arrecife, mejor es la calidad del hábitat para aquellas especies que dependen de él ya sea como refugio o para alimentarse.